Hoy en día el Big Data está de moda, hace presencia en todas las empresas, sin importar el sector al que pertenezcan y las compañías caen en la desinformación que tener un gran número de datos es sinónimo de conocimiento.
Todas las empresas quieren hacer uso de los datos, y ante esta nueva estrategia de mercado se enfrentan con un gran problema: ¿cómo manejar su información, cómo obtenerla, cómo estructurarla, cómo tener mejores reportes, y principalmente cómo analizarla, para tener un mejor análisis, que optimice los diversos procesos de la compañía?
El reto requiere de una solución analítica que consolide la información de las áreas operativo-administrativas, las áreas de ventas, las áreas de logística de las empresas, sobre todo que termine con la inconsistencia en los datos, ya que muchas veces la información es duplicada, diferente o viene en diversos formatos.
El resultado de esta consolidación deben ser datos que estén:
En el lugar correcto: moverlos, trasladarlos y filtrarlo de una manera eficiente que generen valor para la empresa.
En el momento adecuado: la analítica para tener una visión del siguiente paso que la empresa debe dar, no para analizar la historia.
Con las personas adecuadas: compartir la información desde niveles directivos hasta niveles operativos, para que todos estén alineados a la estrategia planteada.
En la forma adecuada: reportes que muestren tendencias, y que pueden ser visualizados en cualquier tipo de dispositivo, para ver cómo se está llegando al objetivo planteado de una manera más rápida.
De no implementar una solución analítica las compañías que manejen grandes datos corren el riesgo de respaldar sus estrategias de negocio sobre una plataforma de datos insuficientes y aislados con reportes inexactos y difíciles de realizar que limiten la visión del negocio.