
Cumplir con las regulaciones de Prevención de Blanqueo de Capitales (Anti-Money Laundering, AML) y realizar la diligencia debida de clientes (Customer Due Diligence, CDD) es un desafío constante para las organizaciones financieras y corporativas. Con la globalización de los negocios y el aumento de transacciones digitales, los procesos tradicionales de