"Solo nosotros podemos hacerlos hablar"
Cuentan que, en un aeropuerto, un grupo de titiriteros llevaba a sus muñecos en el equipaje de mano. Después de que el bolso pasó por el scanner, uno de ellos vio con desesperación que un funcionario uniformado intentaba entender con movimientos bruscos el contenido de aquel bolso. Rápidamente gritó “¡no