Actualmente el panorama económico es complicado y esto puede generar diversas incertidumbres tanto a nivel personal como institucional y gubernamental. La volatilidad financiera se refiere a la rapidez y magnitud con la que cambian los precios de activos financieros, como acciones o divisas. Estos cambios pueden ser causados por varios factores, incluyendo las decisiones económicas de grandes países, la inflación y las políticas de los Bancos Centrales.
Los factores globales y regionales tienen un impacto directo en la volatilidad financiera. La reciente política de “nearshoring” de Estados Unidos, que busca trasladar inversiones desde Asia hacia América Latina, presenta tanto oportunidades como desafíos para la región. La capacidad de los países para atraer estas inversiones será crucial para impulsar el crecimiento económico y gestionar los riesgos asociados a la volatilidad financiera.
Del mismo modo, los factores gubernamentales pueden influir. Las pasadas elecciones en México y otros países de Centroamérica y el Caribe, añade una capa adicional de incertidumbre incide en una mayor volatilidad financiera, que las empresas deben gestionar. Estas variaciones impactan directamente en la confianza de los inversores y en las decisiones de financiamiento.
En el ámbito de las finanzas corporativas, donde los cambios son constantes y la incertidumbre prevalece, las empresas enfrentan desafíos significativos que pueden afectar su estabilidad económica. Pero la analítica avanzada puede ser un salvavidas ante las inseguridades que se pueden genera.
El Papel de la Analítica Avanzada
La analítica avanzada y la inteligencia artificial (IA) son herramientas cruciales para enfrentar estos desafíos. La analítica permite a las empresas evaluar múltiples escenarios y tomar decisiones informadas basadas en datos sólido. Esto es esencial para entender hacia dónde se dirige la economía y cómo deben adaptarse las empresas.
Las soluciones de analítica de SAS permiten evaluar cómo los cambios en las tasas de interés y tipos de cambio afectan sus operaciones, analizar el impacto de eventos políticos, como elecciones, en la confianza de los inversores, así como adaptar sus estrategias en tiempo real según las condiciones del mercado.
Las soluciones de SAS están diseñadas para ser robustas y flexibles, capaces de incorporar diversos tipos de datos y ajustarse rápidamente a nuevos requerimientos. No se trata solo de tener modelos predefinidos, sino de poder adaptar y actualizar estos modelos en tiempo real para reflejar las condiciones cambiantes del mercado y su medio. La velocidad y eficiencia en el procesamiento de datos son cruciales para obtener resultados relevantes en un entorno de alta volatilidad e incertidumbre.
Es importante invertir en recursos humanos y tecnología adecuada para maximizar el potencial de las soluciones analíticas. En este punto, las empresas de vanguardia entienden que invertir en analítica avanzada y en el desarrollo de su personal no solo es una necesidad, sino una ventaja competitiva.
Las soluciones de analítica avanzada y la inteligencia artificial no solo ayudan a mitigar los riesgos, sino que también potencian las oportunidades de crecimiento y desarrollo. En SAS, estamos comprometidos a proporcionar las herramientas y el soporte necesario para que las empresas de América Latina puedan navegar con éxito en este complejo entorno financiero.