En las últimas décadas la presencia de enfermedades como el cáncer, ha aumentado considerablemente a nivel mundial, sin embargo, hoy en día la tasa de éxito en los tratamientos es mayor de lo que era años atrás.
Por ejemplo, en 1975 una persona diagnosticada con esta enfermedad tenía tan sólo el 50% de probabilidades de sobrevivir después de cinco años de tratamiento, afortunadamente en la actualidad, durante el mismo periodo, la tasa de mortalidad es tan sólo del 30%, es decir, la efectividad de los fármacos ha aumentado a un 70%; en el caso de los infantes las cifras también han mejorado, pasando del 62 al 81%.
Logros que no hubieran sido posibles sin el correcto estudio de la data generada alrededor de dicha enfermedad, por ejemplo, con la ayuda de la analítica los científicos han podido identificar factores del estilo de vida que han estado presentes en las incidencias de este padecimiento, los médicos han podido diagnosticar de forma temprana a los pacientes para comenzar con tratamientos oportunos, y a la par ha ayudado al descubrimiento de diversas opciones para los distintos tipos de cáncer que existen.
Si se profundiza en el tema es posible descubrir que la analítica ha sido un player fundamental también en el estudio del genoma humano, el cual ha permitido obtener pistas que den paso al pronto diagnóstico, prevención y tratamiento del cáncer.
Como resultado del estudio de la secuencia genómica, la medicina personalizada genera alternativas de tratamiento diseñadas específicamente para sanar la composición genética única de un individuo, aspecto que trae como consecuencia mayor efectividad y un menores efectos secundarios.
Hace 40 años el cruce efectivo de toda la información generada alrededor de dicha enfermedad entre organizaciones hubiese sido inimaginable, sin embargo actualmente y gracias a la analítica de alto rendimiento, las conexiones de alta velocidad y el almacenamiento de datos asequibles ha sido posible generar grandes proyectos de intercambio de datos que permitan su correcto análisis y con ello, el cuidado de la salud a nivel internacional, contando con tasas de supervivencia más altas, tratamientos personalizados y mayor efectividad de resultados dentro de las investigaciones.