El internet de las cosas, las plataformas multimedia, la movilidad, la realidad virtual y aumentada, han adquirido mayor importancia en los últimos años, transformándose en vitrinas para vender y dar a conocer nuevos bienes y servicios. La realidad virtual y la realidad aumentada, son conceptos tecnológicos que, hasta hace poco, parecían estar solamente al alcance de la industria de los videojuegos, la aviación y el Ejército, y que, ahora, se están abriendo camino de manera exitosa en la pequeña, mediana y gran empresa.
En el caso puntual del sector de consumo masivo (retail), la implementación de tecnologías de realidad aumentada ha permitido que dichas empresas, entreguen nuevas experiencias de interacción digital a todos los usuarios que suelen hacer compras en las tiendas físicas. ¿Cómo lo logran? A través de la proyección de mensajes, productos, servicios u ofertas en el espacio físico, el cual es captado a través de la cámara de un dispositivo móvil. De esta manera, el cliente experimenta, de primera mano aquello que desea comprar, complementado con entradas sensoriales como mensajes, sonidos, gráficos y videos en tiempo real.
Un ejemplo palpable del uso de esta tecnología se da en la presentación virtual de prendas de ropa o zapatos, donde el cliente puede ver cada detalle y apreciar cada color como si tuviera el producto en sus manos, incluso ver cómo se le vería puesto.
Este tipo de tecnologías también se están empleando en las agencias de viaje para mostrarle a los interesados, por ejemplo, cómo es el interior del barco o el hotel donde se podrían alojar y los espacios a los que tendrían acceso. Las empresas que venden mobiliario para el hogar, como: sofás, comedores, sillas o mesas auxiliares, exponen, a través de la realidad aumentada, las dimensiones de cada elemento y el espacio que ocuparía en el lugar donde se vaya a ubicar. Así, los potenciales compradores pueden conocer con mayor exactitud los detalles de un producto, mientras viven una experiencia de compra mucho más personalizada
Cada vez que se recrea un ambiente con tecnologías de realidad virtual o de realidad aumentada, se genera una gran cantidad de información, la cual puede ser aprovechada para entender los gustos, preferencias, comportamientos y hábitos de consumo de los clientes, y al mismo tiempo, para generar modelos predictivos que permiten calcular la probabilidad de compra de un producto o servicio en particular. Apalancados en este tipo de modelos, es posible generar campañas personalizadas en tiempo real, logrando optimizar la experiencia y satisfacción del cliente a lo largo de todo el proceso de compra.
Por su gran potencial a la hora de construir un mensaje diferente, la realidad virtual y la realidad aumentada están cada vez más presentes en las estrategias de marketing de las empresas de los sectores de retail, inmobiliario y de turismo. Su uso constituye una pieza decisiva para crear soluciones que puedan llegar a la mente y al corazón del consumidor final, mientras genera experiencias de consumo que van más allá de lo tradicional. Adicionalmente, la Analítica Avanzada es indispensable dentro de este ejercicio, ya que permite agregarle la inteligencia de fondo a este tipo de tecnologías.