El ecosistema actual de marketing es más complejo que nunca, por lo tanto es imposible gestionarlo sirviéndose únicamente de la intuición. Los clientes son más exigentes y siempre están cambiando entre un creciente número de canales, la competencia sigue aumentando, los presupuestos se desploman y las decisiones tienen que tomarse de forma rápida e inteligente. En pocas palabras, los expertos en marketing luchan por responder tres preguntas, que a primera vista podrían parecer simples, de forma relevante, eficaz y rentable:
- ¿Cómo puedo conocer mejor a mis clientes?
- ¿Qué debo decirles para tenerlos contentos?
- ¿Cómo cuadro mis presupuestos para mantener a mis clientes y a la dirección satisfechos?
Es verdad que un profesional de marketing con experiencia detectará más rápido lo que funcionará que alguien que acaba de empezar. Pero, en un entorno de mercado tan complejo como el actual, hay mucha información que procesar antes de que uno pueda tomar una decisión efectiva. Los mejores profesionales del marketing son aquellos que entienden el poder de los datos y cuentan con las capacidades analíticas suficientes para comprender realmente lo que pueden lograr si los utilizan.
Una de las principales ventajas de la analítica orientada a negocio es una mejor colaboración entre los departamentos de marketing y de inversiones. Los equipos de IT o los analistas, ya no serán la única fuente de analítica de la empresa, por lo que una excesiva carga de trabajo ya no será un peso para marketing.
Uno de los errores más comunes en marketing digital es esperar que una solución “mágica” de Big Data solucione todo. Si el software proporciona lo que promete, debería ser parte de un ecosistema: realmente conectado e integrado en el resto de la arquitectura informática y siguiendo un plan evolutivo. La estrategia es lo primero, siempre.
Cuando se trata de analítica de clientes, las organizaciones deben tener una dirección clara en mente y llevarla a cabo paso a paso. La analítica de clientes requiere una visión holística impulsada por una estrategia digital. Este tipo de plataforma de marketing basada en datos debe ser una red de analítica interconectada que proporcione información que pueda convertirse en acciones valiosas, tomadas sobre la base de un conjunto de reglas de negocio inteligentes. La analítica avanzada de Big Data debería permitir a los gerentes extraer conocimientos prácticos de los datos de clientes que la mayoría de empresas tienen entre manos.
Se trata de crear una visión del cliente de 360 grados. Esta información debe traducirse en marketing y acciones de ventas centradas en el cliente, de las cuales las campañas en tiempo real son su fase más evolucionada. Y, por último, pero no por ello menos importante, se deben definir las reglas internas que se centrarán en las prioridades, la estrategia, las restricciones, el cliente, las preferencias, las restricciones de los canales, los presupuestos y los permisos de contacto. Esto asegurará que la atención centrada en el cliente más conveniente y devolverá el plan de acción que más beneficiará a su empresa.