Cuando Social Media comenzaba a ganar popularidad entre las personas y las marcas, comenzaron a surgir creencias acerca de la disminución de interacciones “reales” o “cara a cara”, puesto que se desarrollaron a la par, soluciones que permitían realizar casi todo desde dispositivos conectados a internet: desde actividades cotidianas, hasta las laborales, o las de interacción social.
Sin embargo, esto no ocurrió así, todo lo contrario. Las actividades que implicaban interacción física entre personas comenzaron a tomar relevancia y a cambiar la manera de vivir las experiencias. Por ejemplo, algunos conciertos comenzaron a transmitirse en vivo vía internet, por lo que para los espectadores que buscan diferenciar y hacer únicas sus experiencias, su respuesta fue querer asistir al concierto, en vez de seguirlo por medios digitales.
Este fenómeno, incrementó la venta de boletos para espectáculos en vivo, lo cual benefició a varias industrias, principalmente a la musical, que ahora centra la mayor parte de sus ingresos en este rubro, cuando antes lo era la venta de sus discos.
¿Qué pasa con los negocios?
Al igual que el comportamiento de un consumidor, las experiencias digitales representan una gran oportunidad en el mundo de los negocios, pues es cada vez más común que los tomadores de decisiones utilicen internet para investigar y estar al día de todo lo relacionado a su industria, su compañía, las tendencias globales, y hasta a sus competidores.
De igual forma, la forma de trabajo diario está migrando cada vez más a lo virtual, popularizando formatos de trabajo a distancia y por cumplimiento de objetivos, más que por horas invertidas, beneficiando a los colaboradores por volverse más productivos y favoreciendo su balance de vida.
La combinación de ambos factores
La forma en que los negocios y la manera de trabajar están cambiando, va a la par de los cambios de comportamiento en las nuevas generaciones, representando grandes oportunidades para los equipos de marketing digital. El reto está no únicamente en crear contenido relevante, sino también, eventos únicos y distintivos con un mensaje central bien definido.
La clave es crear conexiones relevantes entre personas, y de personas con marcas.
Todas aquellas marcas que logren tener este entendimiento y trabajen correctamente, están destinadas a permanecer en la preferencia de sus públicos e incluso, a ampliar su participación en el mercado, como lo muestra el reciente estudio Event Research. El cual concluye que de las personas que acuden a un evento patrocinado o con algún tipo de branding, el 96% es propensa a comprar la marca después de haber asistido.
Las experiencias que conjunten una experiencia en tiempo real, los dispositivos conectados a internet y una inteligente estrategia como base, serán las que los usuarios o consumidores recuerden y compartan más allá de los espacios digitales.
En SAS contamos con Soluciones Analíticas para brindar a las organizaciones el entendimiento y conocimiento 360° de sus clientes, ofreciendo experiencias únicas basadas en datos que permiten predecir cuál será la siguiente mejor oferta para cada uno de ellos.